La Mazmorra Abandon - La mejor selección de abandonware de terror y misterio de la red :: Ver tema - (Sin tÃtulo)
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hacha Prisionero
Registrado: Mar 20, 2006 Mensajes: 48
Publicado: Mar May 11, 2010 4:04 am Asunto : (Sin tÃtulo)
Otra pieza corta de mi producción zombistica. No me dejó tan conforme como otras cosas que he escrito pero es algo, divertido al menos. Disculpen el vocabulario porteño (y algo soez, sÃ, pero lo necesitaba)
No hay duda: MartÃn está muerto. Juan, sin embargo, está lúcido. Pero su lucidez, en vez de permitirle una rápida comprensión de su situación actual, sólo le hace ver que si MartÃn está muerto, es por su culpa.
- Qué pelotudo. Pero qué pelotudo.
Hace diez minutos, Juan se cansó de escuchar por la radio acerca de esa peste de loquitos masacrándose por la calle y resolvió firmemente dejar el taller mecánico para ir a buscar a la vieja.
- De paso le rompo la cabeza a alguno de esos drogadictos de mierda.
- ¿Estás loco? A mà de acá no me mueve ni la policÃa.- MartÃn le gritaba desde el fondo del galpón, tirado abajo de una mesa, con la estampita de San Ceferino entre los dedos- Acá estamos seguros, está todo cerrado, no hagamos boludeces, Juan. Cerrá la puerta!
- VenÃs conmigo o te quedas solo acá, cagón. Si a la vieja la agarra alguno de esos degenerados le dejo la cabeza hecha un desastre.- Con una mano en la puerta y la otra sosteniendo una llave inglesa de 5 kilos, lo miró a los ojos para no dejar de dudas de que lo decÃa muy en serio.
MartÃn dudó 5 segundos, y justo antes de que Juan se diera vuelta dejándolo ahà tirado, se levantó como un rayo y corrió a su lado. Juan empujó con fuerza la puerta del galpón y ganó la calle de un salto. MartÃn lo seguÃa a tientas, mirando para todos lados y haciendo fuerza para que los dientes le dejaran de castanear.
- Dale, caminá tranquilo, agarramos el auto y...
Juan no terminó la frase, en parte porque en realidad no sabÃa como terminarla, porque le hablaba sólo para darle ánimos, y por otro lado porque cuando se dió vuelta para mirar a MartÃn pudo ver con perfecta claridad como Chávez, el del Megane gris, se arrojaba sobre su amigo con una furia inexplicable y la boca horriblemente abierta.
Pero Chávez no sólo no parecÃa el Chávez de siempre, sino que tampoco parecÃa un drogadicto enajenado como los que Juan esperaba encontrarse en el camino. Chávez parecÃa... muerto.
- Muerto- pensó en voz alta Juan, que aún antes de su extraña deducción, habÃa ya iniciado un rápido movimiento de derecha con el que le hundió la llave inglesa en el cráneo.
Chávez cayó al suelo inmóvil y Juan se le acercó un poco para observarlo mejor. Necesitó unos segundos para estar seguro de que ese cuerpo bañado de sangre, del cual uno de los brazos habÃa sido cercenado, con la camisa abierta para mostrar una herida muy profunda y aún sangrante a la altura del hÃgado, y esa cara ya empalidecida (y ahora con la mitad izquierda destrozada) pertenecÃan al habitual cliente.
Juan escupió:
- Por forro. Ya no me va a venir más con eso de que le cagué la suspensión.
MartÃn no se rió, a pesar que lo odiaba tanto a Chávez como su compañero. Juan se volteó para mirarlo y descubrió que MartÃn no se reÃa porque simplemente no podÃa reirse. TenÃa un agujero a la altura de la yugular que no paraba de chorrear sangre, a pesar de que MartÃn ensayaba con las manos una suerte de torniquete. Juan se arrojó sobre su amigo, desesperado, y le quitó de en medio las manos para evaluar la seriedad de la herida.
Estaba por decir algo como "No es nada, mariconazo, tranquilo", pero se daba cuenta que su amigo necesitaba ayuda urgente, asà que no dijo nada. Hacia él caminaban tres más de esas cosas, con un paso tan débil y errático que era difÃcil entender como se mantenÃan en pie. El que venÃa al frente tenÃa pinta de jovencito, Juan no lo conocÃa, y un tajo le recorrÃa el torso desnudo desde el ombligo hasta el hombro. No le costó mucho tirarlo al piso y reventarle la cabeza con la llave, salpicándose la cara con una mezcla de sesos y sangre. Los dos que venÃan detrás, el canillita de la estación del tren y una mujer con pinta de trasnochada, no podÃan representar gran peligro. Juan agarró la llave inglesa con las dos manos y miró a MartÃn sólo para darse cuenta que cada vez le costaba más respirar.
- Se salvan por ahora, hijos de puta, pero ya los voy a agarrar.- Juan agarró a MartÃn de los pies y lo arrastró dentro del taller,cerrando el portón atrás de él.- Aguantá, hermano, te voy a sacar de acá en un pedo.
Juan espió por la ventana para ver que afuera se congregaban ya el canillita, la prostituta, y dos o tres más, que miraban los restos de Chávez con fascinación.
No hay duda: MartÃn está muerto. Juan, sin embargo, está lúcido.
- Qué pelotudo.- Se lo dice a él mismo, pero lo disimula dirigiéndose a MartÃn.
Lo único que le queda a Juan es poner a andar el Dodge 1500 y salir volando de ahÃ. Le faltan sólo las dos llantas de atrás, el resto del auto está perfecto. Poner las ruedas en su lugar no le lleva cinco minutos.
Una última espiada a la vereda. Los porquerÃas esas deben ser como diez, entre los que están contra la puerta y los que se ven llegando desde la esquina opuesta. Juan sabe qué hacer:
- Me voy a la mierda pero ya. Ya.
El Dodge arranca. Pero Juan, rápido de memoria, recuerda que le habÃa metido mano al Dodge para que el dueño se lo trajera de nuevo la semana que viene, a más tardar. Se baja dejando el motor en marcha y va derecho a la caja de herramientas.
- A estos fierros no los matás con nada. - El sonido del Dodge aturde y a Juan le da confianza.
El sonido del Dodge aturde. Aturde tanto que Juan no escucha nada en todo el tiempo que le toma a MartÃn, o a lo que queda de MartÃn, levantarse y caminar, con ese pasito débil y errático, hasta él.
Cuando Juan se voltea sosteniendo el destornillador en la mano, todavia le queda un segundo para ver como los dientes de MartÃn se le hunden en el cuello.
- Qué pelotudo. Pero qué pelotudo. - Juan, aún en sus últimos suspiros, está lúcido.
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guardian Administrador
Registrado: Oct 28, 2005 Mensajes: 9908
Publicado: Dom May 16, 2010 3:01 am Asunto :
¡Cuánta violencia! Pero al igual que el otro, tremendamente descriptivo, lo cual es muy bueno
Tienes que explicarles a los usuarios el hecho de que aparezca "Sin tÃtulo", que yo lo sé pero ellos no.
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hacha Prisionero
Registrado: Mar 20, 2006 Mensajes: 48
Publicado: Lun May 17, 2010 11:34 pm Asunto :
Bueno, originalmente cuando lo escribà formaba parte de la introducción a un capÃtulo del blog de supervivencia, titulado "Primeras consideraciones". Éste trataba sobre las primeras medidas y evaluaciones que deben hacerse en los momentos tempranos del estallido de la epidemia. Las decisiones que tomemos serán claves para nuestra supervivencia. Juan actuó rápido, sin saber a lo que se enfrentaba, sobreestimando su propia capacidad y al mismo tiempo subestimando la fuerza de una jaurÃa que no era la pandilla de borrachines que tenÃa en mente. Como vimos, no le fue nada bien...
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Ivanzx Recién detenido
Registrado: Mar 22, 2010 Mensajes: 2
Publicado: Jue Jun 03, 2010 2:08 am Asunto :
Pues si, mucha violencia eh! Pero no esta mal, que tal algun relato sobre Alienigenas? Es un tema que siempre me ha parecido bastante interesante, de hecho vivi en USA en una de las regiones con mas avistamientos de OVNIS.
Un saludo!
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