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Publicado: Dom May 25, 2008 11:40 pm Asunto: Tinieblas - 2ª Parte
Giré a la derecha, después del susto, y del maldito y ensordecedor... suceso, paré por un momento en el arcén, y me dispuse a ordenar mi mente por una maldita vez… apoyé mi cabeza en el volante, después, me estiré y me recliné hacia atrás… todo esto tenía que tener una explicación, maldita sea!, sí!...
Pasados unos largos diez minutos, que me parecieron una eternidad, me dispuse a arrancar el coche de nuevo, y dirigirme a mi apartamento, darme una ducha, y después, repasar los informes, hacer unos cuantos esquemas y aclararme… cuando giré la llave, el motor emitió una débil respuesta, muy diferente a la enérgica que siempre recibía de él, lo intenté una, y otra y otra, y otra vez, hasta que me negué a creerlo, la noche parecía ir en mi contra, y contra todo pronóstico, como decía el refrán, los males no vienen solos.
Decidí llamar al seguro para que recogieran el coche, miré en la guantera, encendí la luz interior, y llamé… no había comunicación, llamé una, otra y otra vez, y nada de nada, esto era ya no tanto inquietante, más que molesto…
Salí de mi Ford Mustang de muy mala gana, me dolía tener que dejarlo allí, había pasado mucho con el coche, y era una maravilla, de las pocas cosas que por capricho o por maniatismo, había adquirido a lo largo de mi vida… acaricié el capó, y llevando conmigo mis informes, cerré la puerta, y aseguré el pestillo de la otra puerta. Cuando llegara a casa probaría a llamar a la aseguradora y que me recogieran el coche.
Lo peor de todo, es que mi casa todavía quedaba a unos 30 minutos andando a buen ritmo, y por tanto, seguí lentamente, mirando mi vehículo, mientras avanzaba, y hasta que pasara un taxi que me llevara, a los 5 minutos, mientras andaba, logré conseguir un taxi… el taxista me preguntó, y le dije la dirección, y se dispuso a ir para allí… mientras pasaba, y veía a pobres moribundos, “templos del placer”, prostitutas abrigándose ante la fría noche, parejas paseando, me abstraí entre todo aquel maremágnum social, ante la ventana de un taxi cualquiera de Los Angeles… a mi hogar… a mi Santuario, la idea y palabra me vinieron de repente, y tampoco entendí el sentido del mismo, hasta llegar… todavía me quedó para llegar.
El taxista, 3 minutos después, me saludó, sonriendo, un hombre de color con aspecto risueño a juzgar por su voz y aspecto.
-Qué tal la noche amigo? – preguntó amable, mientras tenía sintonizada una emisora muy buena, con Blues de lo mejor, algo bueno tenía que tener esta nefasta noche, pero es de lo poco que llegaría a tener por ésta.
Le miré, con una sonrisa algo desganada, pensándome la contestación por un instante…
-He tenido noches mejores… -dije, mirándole a su espejo, y devolviéndole una tibia sonrisa, aunque amable.
-Venga amigo… no se preocupe, sea lo que sea… tiene solución, eso tienen las noches, que son algo cargantes –me contestó, convencido.
Me abstraí otra vez por la ventana derecha… pero ante aquella contestación… aquel hombre parecía amable, pero yo no tenía muchas ganas de hablar.
-Bueeeno…psse… no sé - contesté algo ambigüo.
El tipo volvió a mirar al espejo, sonriendo de nuevo.
-Es que le he visto algo ausente, y había pensado que quizás le apetecería algo de charla… y sí, es una noche rara, ha habido incendios en demasiados lugares esta noche… jajaja, bueno, más de los habituales, y es muy raro, sí - dijo el taxista, mientras sintonizaba algo de música
-Nada de importancia… demasiado trabajo, amigo, poco más… por cierto, a qué se refiere con lo de los incendios? – dije, con la típica curiosidad de un sabueso, ya se sabía… deformación profesional como bromeábamos los compañeros en el Departamento.
-Sí, ha sido exagerado, y ha habido hasta críos… por alguna razón parece que dicen que se debe a un extenso escape de gas o no sé qué puñetas de ese tipo… y hasta un suicida que se tiró por una cornisa… para qué contarle amigo, para qué contarle. -dijo algo preocupado y con un ligero enfado.
Mientras los acordes maravillosos de B.B. King llenaban el habitáculo del taxi, me sentí embargado entre la curiosidad, preocupación y goce por la música, me dio un pinchazo de culpabilidad, hasta que me centré, y pregunté al taxista, ya quedaba nada para llegar a mi casa… lo del suicida había sido obra, en cierta manera, mía, miré la emisora, y supe que el buen taxista se mantenía informado adecuadamente, miré por un momento la placa de su licencia, aparecía un hombre de color, sonriente y con ojos pícaros, aunque el resultado, era que parecía un tipo de fiar.
-El mundo está muy, mal, eh? –dije
Sí, y parece ir cada vez a peor – dijo, secamente.
Estaba llegando a mi domicilio, el taxista paró, y le pregunté cuánto le debía…
-Son 5 pavos – dijo, aun a pesar de que la carrera marcaban 6,90 pavos.
-Pero si son casi 7… -dije, al pronto me contestó raudo.
-Paga la casa, ahh, y eso sí… -me dijo sonriendo, y entregándome una tarjeta, y guiñándome un ojo.
Miré escuetamente, era el número para llamarle y pedir este taxi… y la giré, y aparecía el azul título juguetón y redondeado al estilo neón y con fondo oscuro llamado Seven Blues, que anunciaba, los Viernes y Sábados Blues en Directo.
-Vaya, gracias! – dije.
-Ya sabe, si me necesita… llámeme, y si quiere buen Blues, pásese, suelo tocar los Sábados, y mi primo regenta el local, la primera copa gratis… la Vida no es todo trabajo, no cree? – me guiñó el ojo derecho con un aire pícaro, pero amable.
-Lo tendré en cuenta, descuide, y gracias… -dije
-Nos vemos! - dijo
Salí del taxi, y salió disparado de allí, subí a mi apartamento.
Cuando llegué, miré el contestador, había varios mensajes, entre ellos una ex que quería que quedáramos para charlar, aunque por su tono de voz, pareciese otro tipo de asunto…
También había mensajes sobre suscripciones, ventas inusuales, y un aburrido etc…
Me fui a la ducha al poco y en un momento estaba con mi whisky, mis informes cómodamente en mi silla junto a mi escritorio…
Seguí a ese mal nacido durante varios meses… y sus conexiones, todo era muy extraño ahora que lo pensaba… tenía contactos con traficantes de blancas, y cosas peores, pero por otro lado, suministraba droga en ciertos y concretos locales de más o menos relevancia en los Angeles, era de todos sabido, pero nadie los tocaba, algún policía cogido de los huevos, que hacía la vista gorda, y además, de mantener la cabeza sobre los hombros, conseguía un extra, al ya irrisorio sueldo que tenía. La extorsión y el chantaje estaba a la orden del día, y brillaba aún más en la noche, como cual piel de cordero, y el lobo bajo esas luces y frivolidades nocturnas, que en algunos casos eran más que letales, y poco recomendables para cualquiera.
En las fotos de ciertos locales conectados a este tipo, por suerte, encontré, fijándome bien, extraños símbolos, camuflados y con apariencia de adornos bien dispuestos… en cada uno de los locales, había una pauta, los símbolos cambiaban, pero seguían y tenían una particularidad de relación, y por el tipo de local… discotecas, famosas casas de alterne… de repente el teléfono sonó.
Miré el número… privado, mala cosa, no lo cogí, había aprendido a ser prevenido… lo más curioso, es que al acabar los tonos, y al final la voz de un hombre, con una voz profunda y algo apagada… solicitaba una cita para hablar algo importante, parecía nervioso, y algo tenso, sólo dio una dirección y un nombre, este último pareciese como en clave, Santo, y el local, cual fue mi sorpresa, correspondía con una de las fotos que tenía ante mí acerca de la investigación, el local se llamaba Avaricia, y el símbolo correspondía alegóricamente a tal… pecado.
Lo que me jodió bastante, es que ese tipo tuviera mi teléfono, y para más pega, todo me escamaba, y todo se enrarecía bastante… decidí ordenar todos los papeles, y tomar un descanso, apagué la la luz de la mesa, y me fui a la cama a descansar… tuve sueños, raro en mí, sueños sobre criaturas de pesadilla y paisajes de locura…
_________________ <div>"Cuidado con el Ego... cuchillo de doble filo, paradójico en sí mismo, nunca atiende al Raciocinio, en su infancia le llamaban Instinto".</div><br />
Ná, es que ya tocaba, más adelante llegarán más, xDD.
No hay de qué Jefe , aporto lo que puedo con la Comunidad Mazmorrera, que se lo merece.
Un abrazo torturador para el personal , xDD,
Darius.
_________________ <div>"Cuidado con el Ego... cuchillo de doble filo, paradójico en sí mismo, nunca atiende al Raciocinio, en su infancia le llamaban Instinto".</div><br />
Lo prime... siento no haber leído (y posteado) antes. Pero tú deberías haber escrito antes,a sí que empates
Oye, es cosa mía o el toque "Noir" (si, ¿qué pasa? estoy pedante hoy oye xD) ha mejorado bastante desde la primera entrega?. Lo cierto es que se lee en un suspiro, tiene un buen ritmo con esas frases cortitas.
Hala no te hagas de rogar y traenos la historia más a menudo, hombre, que he tenido que releerme la primera, para refrescar... que cuando lleves diez partes necesitaré un mes xDDDDD
Vale, mea culpa, xDD, intentaré escribir la siguiente antes, y las que le sigan.
Estilo Noir?, no, no es pedante, tranqui, está bien, sólo que no me lo imaginaba así, yo sólo escribo y tal, y a ver qué me vá saliendo, xDD.
Aunque sí, un poco a lo cine negro sí que tiene y quiero darle, con tintes un tanto sobrenaturales y demás, ya se irá notando este último algo más.
Espero que disfrutéis con la siguiente, porque habrá más acción.
Saludos relatadores,
Darius.
_________________ <div>"Cuidado con el Ego... cuchillo de doble filo, paradójico en sí mismo, nunca atiende al Raciocinio, en su infancia le llamaban Instinto".</div><br />
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