Hace poco más de cinco años (Octubre 2.004) era fundada la empresa "Telltale Games" por antiguos integrantes de la mítica "Lucas Arts" (Dan Connors, Kevin Bruner y Troy Molander), centrándose en un inicio en juegos para ordenadores compatibles para, posteriormente, desarrollar y lanzar títulos para otras plataformas como Xbox 360 y Wii. De esta forma, sus primeros lanzamientos durante los años 2.005 y 2.006 fueron una versión de la conocida variante de póquer "Texas Hold'em", los dos episodios de la serie "Bone" y algunos de la saga televisiva "CSI", a saber: "3 Dimensions of Murder" y "Hard Evidence".

Sin embargo, el éxito lo alcanzarían entre los años 2.006 y 2.007 con "Sam & Max: Season One" de la mano de del perro detective y el esquizofrénico conejo, dos personajes entrañables que con sus locuras y su humor ácido y mordaz se habían dado a conocer en el año 1.994 y a los que se repescaba de nuevo como reclamo para ganar potenciales clientes. Tras la buena acogida de la primera temporada, a finales de 2.007 la factoría norteamericana se atrevía con la segunda, la cual constaría de 5 episodios que de manera paulatina se irían publicando hasta Abril de 2.008. A continuación verían la luz otras dos sagas elaboradas a partir de entregas, como "Strong Bad's Cool Game for Attractive People" y "Wallace & Gromit's Grand Adventures", basándose esta última en la famosa serie británica de cortometrajes animados de la que son protagonistas la curiosa pareja formada por el inventor y su astuto perro.

Pero la gran apuesta de "Telltale Games" llegaría este pasado verano cuando el 1 de Junio era anunciada la vuelta del pirata más famoso del mundo del "software" lúdico, Guybrush Threepwood. Nueve años de larga espera habían tenido que sufrir los incondicionales de la saga para poder disfrutar de nuevo con las andanzas y desventuras del personaje de apellido impronunciable. Un total de 5 episodios que han sido publicados mensualmente hasta hace escasamente tres semanas, fecha en la que veía la luz el quinto y último de ellos.

No obstante, el resultado no parece haber sido el esperado, y múltiples factores han hecho que las ventas se hayan visto resentidas hasta el punto de llegar a esta asombrosa situación. Según fuentes cercanas a la empresa estadounidense, el presupuesto con el que contaba el juego era realmente elevado y la inversión había superado todo lo que en un primer momento se había previsto. Esto suponía un gran riesgo para una compañía que quiso apostar fuerte por la saga que había sido el emblema de "Lucas Arts" años atrás y en la que se tenía muchas esperanzas. En una época como la que vivimos en la que se exigen resultados inmediatos (véase la televisión, por poner un ejemplo) "Telltale Games" no ha podido cubrir las expectativas generadas y se ha visto abocada a la bancarrota, no dejándola otra salida que el cierre inminente al no poder hacer frente a tales pérdidas.

Lamentamos la situación a la que "Telltale Games" ha llegado tras haberse erigido en una de las principales desarrolladoras de los últimos años cerrando de esta forma un año negro para los amantes de los videojuegos tras los cierres que también durante este 2.009 se habían producido, siendo el más notorio de ellos el de "3D Realms".

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